Desde el 28 de agosto se podrá visitar la muestra fotográfica “Ciao Marcello”

Curaduría: Néstor Saied y Adriano Bruzzese 

Horario de visita: lunes a viernes de 10 a 18 h (Cierre: 10.10)

Proyecto Lumiton, continúa generando acciones que promueven la difusión y conocimiento del séptimo arte y sus máximos protagonistas. En esta línea se enmarca la muestra ¡Ciao Marcello! llevada a cabo en conjunto con la Consulta Regional de Emiliano Romañolos del mundo, que recorre la obra de Marcello Mastroianni, uno de los grandes intérpretes del Siglo XX.

En el marco del centenario de su natalicio, se presenta una muestra fotográfica con afiches de 26 películas, fotogramas y fotografías de sus rodajes, acompañados por fragmentos de entrevistas brindadas por Mastroianni a distintos medios.

La misma se podrá recorrer desde el 28 de Agosto hasta el 10 de Octubre en la Casa de la Cultura de Vicente López

Sobre Marcello Mastroianni 

Contaba Marcello Mastroianni (Fontana Liri, 1924-París, 1996) que cuando le ofrecieron protagonizar La dolce vita él le pidió al director Federico Fellini ver el guión, y lo que obtuvo fue una carpeta que contenía un dibujo pornográfico. Cualquier latin lover digno de ese nombre habría reaccionado con un gesto cómplice, quizá con otra humorada aún más rijosa. Pero Mastroianni enrojeció hasta las orejas y apenas pudo disimular su vergüenza mientras preguntaba: “Muy interesante, ¿dónde hay que firmar?”. Aquel filme, para el que los productores querían a Paul Newman, sería su gran bendición y su pequeña condena. (El País, may 2024) 

Marcello Vincenzo Domenico Mastroianni (Fontana Liri, 28 de septiembre de 1924 – París, 19 de diciembre de 1996), fue un actor italiano. Estuvo entre los más grandes intérpretes italianos, así como también fue uno de los más conocidos y apreciados en el extranjero a partir de los años 60s, especialmente por sus papeles protagónicos en las películas de Federico Fellini y por las películas que protagonizó junto a Sophia Loren. Capaz de compaginar papeles dramáticos y cómicos, generalmente se le asocia con los grandes de la comedia italiana: Alberto Sordi, Ugo Tognazzi, Vittorio Gassman y Nino Manfredi.

Su verdadero debut en el cine tuvo lugar en 1948 con Los Miserables, película de Riccardo Freda basada en la novela homónima de Victor Hugo. En el mismo período comenzó a conseguir pequeños papeles en el teatro, primero en compañías de aficionados. Luchino Visconti se fijó en él, quien le ofreció su primer papel profesional, en “Rosalinda o Como gustéis” de Shakespeare (26 de noviembre de 1948, Teatro Eliseo – Roma) y luego en “Un tranvía llamado deseo” de Tennessee Williams (23 de enero de 1949, Teatro Eliseo – Roma).

Sus primeros papeles dramáticos llegan también al cine en “Pasaporte al Este” de varios directores, “Lulù” de Fernando Cerchio, “Fiebre de vivir” de Claudio Gora, “Crónicas de los pobres amantes” de Carlo Lizzani y “Las noches blancas” de Luchino Visconti, mientras que en el rodaje de “Peccato che è una canaglia” de Alessandro Blasetti conoce a Sophia Loren por primera vez.

Su consagración llegó en 1958 con “I soliti ignoti”, seguida de «Adua e le compagne» (1960). Las dos obras maestras de Federico Fellini: La Dolce Vita (1960) con Anita Ekberg y la posterior “8½” (1963) con Claudia Cardinale, le darán el éxito internacional y la fama de «Latin lover», de la que buscará, más o menos en vano, defenderse hasta una edad más madura. Esta es la razón por la que, inmediatamente después del éxito de “La dolce vita”, intentó disipar su propio mito de símbolo sexual aceptando interpretar el papel de un hombre impotente en la película “Il bell’Antonio” (1960).

Casa de la Cultura de Vicente López: Ricardo Gutiérrez 1060, Olivos