El diputado nacional reclamó que Patricia Bullrich dé explicaciones en el Congreso.
En diálogo con Napalm por Radio Provincia AM1270, reconoció que el encuentro entre legisladores de LLA y detenidos por delitos de lesa humanidad le causó «estupor y la sensación de que cláramente, contra lo que nos quisieron hacer creer, había un plan orquestado que tenía como objetivo avanzar con fórmulas que permitieran la reducción de las penas de los genocidas. Esto está relacionado con otro proyecto que ingresó al Congreso y que pretende, a través de una modificación a la Ley de Seguridad Interior, asignarle a las FFAA injerencia en la represión interna. Está claro que una cosa y la otra están vinculadas, porque no podían avanzar con ese proyecto si antes no resolvieran con algún tipo de indulto o reducción de penas».
Consultado por el rol de la ministra de Seguridad, aseguró que «Patricia Bullrich está comprometida, por más que diga lo contrario. Estamos intentando que venga a dar explicaciones. Está claro que las circunstancias ameritan su presencia en el Congreso. Además es una obligación constitucional y debemos seguir en esa línea hasta que eso ocurra. La única manera de transparentar esos planes es con la presencia de quienes lo están impulsando».
En cuanto a las divisiones en el seno del oficialismo, consideró que «aunque tengan contradicciones con las ambiciones políticas de los principales componentes de la cúpula de LLA, esas contradicciones no existen en el plano de la lectura que hacen de la dictadura genocida. Para ellos no hubo terrorismo de Estado, para ellos no hubo un plan sistemático de exterminio, que además no escatimó ninguna aberración imaginable, desde las violaciones, secuestro de niños o arrojar detenidos vivos narcotizados desde los aviones. Reivindicarlos, lejos de ser un acto humanitario, es un acto en el marco del objetivo que se trazaron, el intento de consolidar la teoría de los dos demonios, que hubo excesos y víctimas de los dos lados. Entre Milei y Villarruel, en ese punto, no tienen contradicciones».
En ese contexto, Yasky recalcó que también «la presión en la calle es necesaria, como lo hizo el pueblo de manera ejemplar en el 2017. No olvidemos que si no hay genocidas beneficiados en sus penas, fue porque el pueblo salió a la calle y se llevó por delante el 2 x 1».
Por otro lado el Diputado se refirió al aumento en las jubilaciones y recalcó que en el Congreso «no estamos lejos de reunir la mayoría especial para anular el veto del Presidente. Nos pondría en otro lugar en la batalla contra la embestida de Milei, que parece quiere vandalizar la democracia argentina». Sin embargo, Yasky insistió en que las manifestaciones deben ser parte de la respuesta social: «Si hay un veto, no solamente las centrales sindicales, los distintos sectores de la sociedad tienen que buscar, en un marco de unidad, que se dé una respuesta masiva al veto del Presidente»
