>En total, se quemaron casi 495 kg de droga, mayoritariamente cocaína, marihuana y otras sustancias psicoactivas.
“Menos droga en las calles es más vida para nuestros hijos”, aseguró el Ministro Wolff. Por esto, felicitó “el trabajo conjunto de la Justicia, el Ministerio de seguridad y la Policía”, ya que “esta acción sin dudas representa una mejor vida para nuestra gente”.
El lugar de la incineración es una planta recicladora ubicada en el partido de Tigre, específicamente en la localidad de Ricardo Rojas. Para realizar la quema se toman serias precauciones en cuanto al material estupefaciente que se traslada, solicitándose una cápsula de seguridad policial hasta las instalaciones de la planta, que permanece allí hasta que se produzca la efectiva destrucción de las drogas. Antes del traslado, las cajas se sellan, embolsan y precintan con personal del Consejo de la Magistratura y de UFEIDE, quienes dan fe de todo el material.
El horno que destruye la droga es un horno pirolítico, de gran volumen, que posee una boca de ingreso del material tipo tolva de unos 50 cm de amplitud y, al arrojar el material, cae al piso del horno y se desliza por su interior por propio peso. Luego, pasa por varios procesos de alta temperatura cuyo final es vapor de agua logrando con ello evitar la contaminación del ambiente.