Aunque por debajo de la inflación oficial, la mano de obra, el aumento de combustible y los costos de mantenimiento en el sector logístico continúan aumentando, repercutiendo no sólo en la rentabilidad de las empresas sino que también en el precio al consumidor final, quien muchas veces paga tanto de envío como el costo mismo del producto que está comprando.

La actual crisis económica y política que atraviesa Argentina ha impactado severamente a todos los sectores, incluyendo la logística. De acuerdo, con un informe realizado por la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) a través de su Centro Tecnológico de Transporte, Tránsito y Seguridad Vial (C3T), se dio a conocer la evolución del Índice de Costos Logísticos Nacionales elaborado para la Cámara Empresaria de Operadores Logísticos (CEDOL) que muestra un aumento del 6,55% durante el mes de marzo, cifra que ha generado un impacto significativo en la rentabilidad de las empresas y en los precios finales de los productos.

“Diversos factores han incidido en este alarmante aumento. Entre los principales se encuentran el fuerte incremento del precio de los combustibles, que ha encarecido significativamente el transporte de mercancías, y la aceleración de la inflación, que ha impactado en los costos de mano de obra, insumos y mantenimiento. Esta situación no solo ha dificultado la capacidad de las empresas para operar de manera eficiente y rentable, sino que además los costos terminan trasladándose a los clientes, lo que disminuye la competitividad a nivel regional o global” explicó Guillermo Cervellera, Gerente de División Consumo e Industria de Celsur Logística.

El aumento de los costos logísticos ha golpeado con mayor fuerza a ciertos sectores económicos, como el consumo masivo, los mercados de entrega directa al consumidor final y los rubros de productos de bajo valor agregado. Estos sectores se enfrentan a consecuencias adversas, como la reducción de márgenes de ganancia y la pérdida de competitividad frente a productos importados. Esta situación podría traducirse en una disminución de la actividad económica y en un mayor riesgo de pérdida de empleos en dichos sectores.

Ante este panorama desafiante, las empresas del sector logístico buscan implementar diversas estrategias para optimizar sus costos. “Estrategias basadas en la flexibilidad permitirán sinergizar recursos para aportar productividad y con ello bajar costos. Las compras centralizadas y de largo plazo pueden aportar también ahorros importantes. Además la implementación de tecnologías que permitan mejorar la eficiencia operativa y la búsqueda de alternativas de transporte más económicas, son soluciones cada vez más empleadas y efectivas.” agregaron desde Celsur Logística.

En el mediano plazo, se espera que los costos logísticos continúen siendo objeto de presiones al alza, especialmente si persisten los conflictos bélicos globales que afectan los precios del combustible. No obstante, es fundamental que todos los actores del sector, incluidas las empresas, los gobiernos y las organizaciones civiles, trabajen de manera coordinada para encontrar soluciones sostenibles que permitan mitigar el impacto de estos desafíos y promover el desarrollo económico y social.

Es necesario aunar esfuerzos para implementar políticas públicas que fomenten la eficiencia, la inversión y la innovación, así como para generar un diálogo abierto y constructivo entre las diferentes partes. Solo a través del trabajo conjunto será posible construir un futuro próspero para la industria logística argentina.