La familia de Soledad Olmos empezó la búsqueda de la joven de 33 años después de una semana sin recibir noticias. El 25 de febrero, como acostumbraba hacer durante su viaje, se comunicó con su hermana para avisarle que estaba en La Paz, Bolivia. Después de ese mensaje, no volvió a escribir.
Hacía dos meses que se había ido de mochilera desde su casa de Tigre al norte del país. Según relató su hermana Olga, viajaba sola y había decidido cruzar a Bolivia junto a otro joven que conoció durante el viaje. “Ella se comunicaba conmigo todo el tiempo, siempre me avisaba dónde estaba y el último mensaje que mandó fue desde un celular prestado porque el de ella ya no tenía señal”, le dijo a a TN.com.ar.
En aquella conversación, Soledad le contó que planeaban viajar junto a su nuevo amigo hacia Isla del Sol o Copacabana (Bolivia). Hasta ahora la familia no sabe efectivamente si lo hicieron. No pudieron volver a comunicarse con ninguno de los números.
La denuncia por la desaparición de Soledad Olmos está radicada en el destacamento policial de Milberg.
