Junto a la gastronomía, fueron de los rubros más solicitados durante los días previos y posteriores a la competencia. Se estimó un ingreso de 25 millones de pesos adicionales para el municipio.
La capacidad hotelera del Municipio de Tigre se vio colmada por el regreso del IronMan 70.3, uno de los triatlones más antiguos y exigentes del planeta. Según precisó la Agencia de Desarrollo Turístico local, el porcentaje de alojamiento fue del 100% en la zona continental de Tigre y tuvo altos índices en el Delta. Se estimó un ingreso de más de 25 millones de pesos adicionales para el municipio, siendo hotelería y gastronomía los rubros más solicitados.
“Estamos felices por el impacto económico que producen encuentros de este estilo en nuestra comunidad. Es una alegría por partida doble, tanto porque volvimos a ser sede de un evento de renombre mundial, como así también por los recursos que genera para el municipio. Esto significa más trabajo para nuestros vecinos y prosperidad para la comunidad”, señaló el intendente de Tigre, Julio Zamora.
Además del saldo positivo por la ocupación hotelera, otro de los rubros destacados fue la gastronomía. Los prestadores informaron que los paseos de todo el distrito incrementaron considerablemente el número de comensales respecto a la primera edición de la competencia.
Los atletas y visitantes disfrutaron los atractivos turísticos de Tigre. Entre los lugares más visitados se encuentran el Puerto de Frutos, que conjuga lo tradicional en decoración con las nuevas tendencias, y su Delta, único en el mundo, donde participaron de travesías en canoas y kayaks.
Cabe destacar que la constante expansión de propuestas para los turistas y las medidas implementadas para hacer de su estadía una experiencia inolvidable, han convertido a Tigre en uno de los principales destinos turísticos de la Argentina, con casi 5 millones de visitantes al año.
