Bajo el arbitraje de Fernando Rapallini, los “Diablos Rojos” recibieron al “Matador” en el Estadio Libertadores de América. Independiente tuvo su mejor chance en el primer tiempo por intermedio de un penal, pero fue atajado por el arquero Batalla.

Tras el austero empate que mostró el primer partido de la 7ma fecha de la Superliga. El Rojo a pesar de contar con la localía dejó muchas dudas dentro de la cancha y por momentos se mostró desorientado a la hora de encarar hacia el arco contrario.

A los 23 minutos del primer tiempo Independiente tuvo la mejor chance del partido, una situación de penal que no pudo ser convertida por Gonzalo Verón.

El arquero de Tigre, Augusto Batalla fue figura del partido, no solamente por atajar el remate desde los 12 pasos sino porque además de taparle un mano a mano a Gigliotti, logró evitar varias veces la caída de su arco.

Por su parte los oriundos de Victoria que mostraron tener una actitud un poco más agresiva, lanzados al ataque desde el comienzo, de a poco se fueron retrasando y no lograron concretar la idea con la que arrancaron desde el inicio del partido.