Durante un operativo de control realizado en la selecta playa La Frontera, de Pinamar, un centenar de inspectores de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires, conducidos por el titular del organismo, Iván Budassi, detectaron más de 400 motos de agua y jet ski que se encontraban sin declarar ante el fisco y, de esa manera, evadían el pago del Impuesto a las Embarcaciones Deportivas. Esto representa más del 90% de las embarcaciones de este tipo controladas.
Budassi explicó que “los propietarios de las motos de agua fueron intimados porque no cumplían con su obligación de registrarlas ante el fisco”, y resaltó que “estos contribuyentes nunca pagaron el tributo a las embarcaciones, por lo que la maniobra de evasión alcanza los $2 millones por año”.
Ahora, quienes recibieron intimaciones deberán declarar sus vehículos de agua y abonar los impuestos impagos. Si no lo hacen, Arba los incorporará de oficio a sus bases de datos y aplicará las multas correspondientes. Budassi sostuvo que “se trata de un tributo con un nivel importante de incumplimiento, por eso estamos desarrollando acciones concretas sobre este sector de contribuyentes para mejorar la cobrabilidad del impuesto”.
La labor de Arba se desarrolló en conjunto con la Jefatura de Gabinete, que conduce Alberto Pérez, que llevó adelante acciones de prevención y distribuyó 500 banderines reglamentarios a los veraneantes que se movilizaban en cuatriciclos, como medida de protección para mejorar la visibilidad de esos vehículos en los médanos y evitar accidentes.
Durante la fiscalización en La Frontera, los inspectores de Arba también retuvieron 12 camionetas doble tracción, cuyos propietarios registraban un importante nivel de deuda en el Impuesto a los Automotores.
Estos contribuyentes abonaron lo que debían en el acto, pagando con tarjeta en un puesto móvil de Arba que se encontraba en el lugar, y recobraron la posesión de sus rodados. Con esta labor de control, los inspectores de la Agencia recuperaron más de $250 mil en concepto de Patente.
