Para impulsar el reciclaje y el cuidado del medio ambiente, el Municipio coloca cestos para que la gente se sume a esta iniciativa ecológica.

Para fomentar el cuidado del medio ambiente y que las personas adquieran el hábito de reciclar, San Isidro instala tachos diferenciados en espacios públicos.

Plazas, parques y oficinas municipales son los lugares en donde la Subsecretaría de Espacio Público empezó esta campaña. El objetivo es que las personas se acostumbren a clasificar la basura antes de tirarla al tacho para que, de a poco, también lo hagan en sus casas y trabajos.

El subsecretario de Espacio Público, Federico Bereziuk, contó que en 2014 se colocaron los primeros tachos diferenciados y que la respuesta de la gente fue muy positiva.

Bereziuk explicó que el desafío al que ahora se apunta es a la educación: “Nos encontramos con que muchas personas no saben bien qué materiales pueden reciclarse”.

El funcionario también adelantó que el Municipio lleva adelante iniciativas de concientización junto con ONGs que se ocupan de informar y dar charlas en colegios y actividades especiales.