El Papa afirmó que «la soberbia y el orgullo son muros que impiden la relación con Dios». Y agregó que “nos reconforta contemplar a Jesús que no excluye a nadie. Él no tenia miedo de dialogar con pecadores y prostitutas».

El papa Francisco aseguró hoy que «no hay santo sin pasado ni pecador sin futuro», al tiempo que aseveró que «la Iglesia no es una comunidad de perfectos», durante la audiencia general de este miércoles en el Vaticano ante unos 22.000 fieles.

«No hay santo sin pasado, y no hay pecador sin futuro, esto hay que recordarlo», dijo el pontífice argentino ante la multitud reunida en la Plaza San Pedro.

«La Iglesia no es una comunidad de perfectos, sino de discípulos en camino, que siguen al Señor porque se reconocen pecadores y necesitados de su perdón. La vida cristiana es, pues, una escuela de humildad que se abre a la gracia, en la que se aprende a ver a nuestros hermanos a la luz del amor y de la misericordia del Padre”, agregó.

Además, el obispo de Roma afirmó que «la soberbia y el orgullo son muros que impiden la relación con Dios».

“Nos reconforta contemplar a Jesús que no excluye a nadie. Él es el buen médico que se compadece de nuestras enfermedades. No hay ninguna que él no pueda curar. Nos libra del miedo, de la muerte y del demonio. Jesús no tenia miedo de dialogar con pecadores y prostitutas», concluyó.