Ante la difusión pública de lo ocurrido en el Colegio Stella Maris de Munro, el obispado de San Isidro comunica:
El viernes 16 de mayo tomamos conocimiento que un alumno de nuestra institución habría ingresado con un elemento riesgoso para la comunidad educativa.
A partir de ese momento nos encontramos en diálogo con la familia del alumno.
Asimismo estamos en permanente contacto con las autoridades educativas pertinentes a fin de tomar las medidas y decisiones que sean convenientes.
Dada la gravedad de problema el colegio asume el compromiso de velar por la integridad del alumnado y acompañar a la familia del alumno en cuestión.