Así lo expresó el diputado nacional Sergio Massa, luego de mantener un encuentro con rectores y representantes de alumnos universitarios en el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), quienes le manifestaron cuál es la situación presupuestaria para la educación superior y su intención de aumentarla, de cara al Presupuesto Nacional 2017 que se comenzará a debatir en las próximas semanas. En ese contexto, Massa advirtió: “Desde el Frente Renovador aspiramos y empujamos todas las iniciativas que permitan que Argentina se desarrolle y que sea un país con movilidad social. En lugar de buscar consultoras extranjeras hay que trabajar con el conocimiento que hay en las universidades nacionales. Queremos que los proyectos universitarios estén asociados al desarrollo económico de las regiones”. 

Durante el encuentro, llevado a cabo en la sede del Consejo Interuniversitario Nacional, las autoridades universitarias y los representantes de los alumnos le solicitaron a Massa el apoyo de su bloque legislativo a su iniciativa de aumentar el presupuesto para el 2017.

Este reclamo, tiene como eje principal el ajuste presupuestario destinado a las universidades, ya que el mismo se encuentra desfasado por la inflación y el tarifazo; aumentar los recursos destinados a la investigación, siendo una de las principales vías que tienen las universidades de elevar su calidad educativa; aumentar el personal no docente para tareas administrativas, que quedó desfasada ante el gran crecimiento de la matrícula de alumnos, e incrementar la cantidad de tutores que den apoyo a los alumnos en los primeros años, para evitar luego el abandono de los estudios.

En ese sentido, el líder del Frente Renovador sostuvo: “La educación universitaria de los países impacta directamente en el desarrollo de sus ciudadanos, en la economía y en la sociedad en su conjunto. En Argentina todavía no tenemos una hoja de ruta para alcanzar ese desarrollo. Sin embargo sabemos que en materia universitaria tenemos tres grandes desafíos: Reducir la alta deserción estudiantil,  incrementar la graduación en las carreras científicas y tecnológicas, y promover el acceso de estudiantes provenientes de hogares humildes mediante programas de becas”.

Y añadió: “Todo eso se logra primeramente con un plan de gobierno y con políticas públicas activas. Una forma de empezar a demostrar el compromiso por mejorar la calidad de las universidades públicas es a través del diseño de un presupuesto de educación superior realista y acorde al contexto económico que vivimos”.

“Desde el Frente Renovador aspiramos y empujamos todas las iniciativas que permitan que Argentina se desarrolla y  que sea un país con movilidad social. En lugar de buscar consultoras extranjeras hay que trabajar con el conocimiento que hay en las universidades nacionales. Queremos que los proyectos universitarios estén asociados al desarrollo económico de las regiones”, indicó.   

Por último, remarcó: “Hoy tenemos la oportunidad de revisar el presupuesto 2017 para la educación superior. Aprovechemos esa oportunidad y comprometámonos al 100%. Apostemos por el presente y por el futuro de nuestro país”.

Durante el encuentro, se plantearon aspectos de la situación universitaria argentina, entre los cuales cabe destacar los siguientes: el presupuesto universitario 2016  asciende a 51,9 mil millones de pesos (de los cuales 85% se destina a salarios), cifra que fue calculada con una inflación del 25% anual, cuando este año la inflación anual ronda el 40%.

En mayo el presupuesto para educación superior recibió un refuerzo de 500 millones de pesos para las 49 universidades nacionales, con el objetivo de paliar el efecto del tarifazo. Sin embargo ese dinero representó sólo el 4,5% del presupuesto para gastos de funcionamiento. Al término del mes de julio, el gobierno de Macri había ejecutado el 56,93% del presupuesto para la educación superior.

No se cuenta con una política que promueva las carreras que se necesitan. En las universidades públicas se gradúan 10 licenciados en Economía y Administración por cada licenciado en Biología. Además, por cada ingeniero se gradúan 2,4 abogados. Las diferencias son aún mayores en las universidades privadas.

Entre 2003 y 2015, la matrícula en universidades privadas creció un 500% más que en las públicas.

Durante el kirchnerismo el 12% de los alumnos universitarios provinieron de hogares con menos recursos del país. En Chile -donde el sistema está privatizado -esta cifra asciende a 17% de alumnos que proceden de los sectores más vulnerables.

La Argentina tiene una de las mayores tasas de acceso estudiantil a la universidad, aunque una de las tasas más bajas de egresados. De cada 10.000 habitantes 436  ingresan a la universidad, de los cuales solo logran graduarse 28 .

Participaron del encuentro el Dr. Guillermo Tamarit, Presidente del CIN y rector de la Universidad Nacional del Noroeste de la Provincia de Buenos Aires, el Lic. Rodolfo Tecchi, vicepresidente del CIN y rector de la Universidad Nacional de Jujuy, el Dr. Felix Nieto Quintas, presidente de la Comisión de Asuntos Económicos del CIN y rector de la Universidad Nacional de San Luis. Oscar Spada, director general del CIN y Miguel Gonzalez, secretario ejecutivo.

Por parte de los alumnos, participaron Josefina Mendoza, Presidenta de la FUBA (JUP),  Ezequiel Marín, vicepresidente de la FUBA (Franja Morada), Constancia Bossio, Secretaria General de la FUBA (JUP) y Mariano Lanuguere (JP).

Asimismo, también estuvieron presentes Ajejandro Snopek, diputado nacional, Daniel Arroyo, referente social del Frente Renovador, Gustavo Iaies, asesor en temas educativos y Mario Meoni.