Consultado sobre la ley de policías municipales que está siendo tratada por el legislativo provincial, el Intendente de San Miguel, Joaquín de la Torre, afirmó: “Si la ley se aprueba así como está, no obtendremos buenos resultados. Primero porque las primeras fuerzas disponibles podrán empezar a trabajar recién a fines del año que viene o a principios del 2016, lo cual parece una cargada teniendo en cuenta la reciente declaración de emergencia en seguridad por parte de Scioli”.
Y agregó: “El segundo problema que presenta es el del financiamiento, que no queda claro, ya que el traslado de fondos a los municipios no es automático por lo que corremos el riesgo de caer otra vez en los repartos discrecionales, como nos pasa hoy con la coparticipación en temas de salud u obras públicas.”
Por último agregó: “El tercer defecto que presenta es el poder que esta ley le otorga a las fuerzas municipales: no nos permiten tomar agentes retirados, no los autorizan a portar armas después del horario de trabajo ni tampoco a demorar sospechosos para averiguar antecedentes.”
Y concluyó: “Esta ley, si sale así, terminará siendo una movida marketinera, que encima nos tiraría a los intendentes la responsabilidad de la seguridad. Y en esto Scioli sí es un especialista: subido a su ola naranja reparte los problemas, se los saca de encima y no asume responsabilidades. Es otro paso al modelo “pindapoy” de provincia”.